El uruguayo Martín Cabrera trabajó tres años y medio en el negocio de Google Cloud antes de ser socio líder de Inteligencia Artificial y Datos en Deloitte. También estuvo en el banco BCI, dirigiendo al equipo de Data y Analytics. Toda una relación laboral con el tema de Inteligencia Artificial Generativa que ya suma catorce años.
Esta semana, Deloitte realizó el primer taller para periodistas sobre uso de Inteligencia Artificial, con el propósito de hacer impactos que importan, el que fue, justamente, dirigido por Martín Cabrera. El espacio contó con una explicación de conceptos básicos y también demostraciones de usos de la tecnología para el desarrollo de la labor periodística.
Tras eso, Martín conversó con Cofibreik sobre los avances globales y locales de la IA durante 2024 más lo que se puede venir en 2025.
¿Qué dirías tú que marcó el 2024 en Inteligencia Artificial?
Creo que el año pasado realmente se generó una expectativa enorme de impacto del uso de la Inteligencia Artificial en todas las industrias. Lo he visto de manera sistemática en muchos clientes, en muchas empresas. Creo que también una adopción tremendamente masiva de este tipo de herramientas también en el ámbito de uso personal.
O sea, la gente efectivamente ha hecho de las herramientas de Inteligencia Artificial sus herramientas de uso diario.
Así es: a nivel particular, para simplificar su día a día y eso es un fenómeno también muy relevante. En el ámbito más corporativo, que es donde yo más estoy, ha habido mucha experimentación y todavía quizás el impacto generado todavía ha sido leve. Por lo tanto, es de esperarse que este año ya todos esos experimentos que se hicieron el año pasado, ahora se vuelvan productivos y realmente las empresas empiecen a competir de manera cada vez más acelerada en cómo le sacan provecho a la Inteligencia Artificial para poder justamente diferenciarse del competidor.
Y todo eso debería de empezar a redundar en mejores experiencias y más beneficios para los usuarios…
Lo que deberíamos de ver es un fenómeno de que cada vez más todos como consumidores nos beneficiamos, porque después las empresas van a generar mejores experiencias con Inteligencia Artificial y nos van a ofrecer productos más relevantes.
¿Esto quiere decir que la llamada hiper personalización se va a transformar gradualmente en una realidad?
En el ámbito de la productividad personal vamos a ser cada vez más productivos, porque vamos a estar asistidos permanentemente por Inteligencia Artificial. Da lo mismo si tu rol es más técnico, más operativo, más contable, más financiero. Todos hoy podemos sacarle provecho a esto.
Y es inevitable que incluso ciertos hábitos, como por ejemplo los hábitos de estudio, se vean fuertemente impactados también. Y yo creo que a la larga positivamente. Al final, la información está disponible. Creo que es cada vez más relevante el cómo se aplica ese conocimiento, más que el conocimiento en persona. Y eso también lo vamos a ver de manera muy acelerada. Y tocando un poco todo, todo el espectro, el espectro personal y el espectro más corporativo.
¿Cuál fue la inversión en estos años -o el año pasado- en Inteligencia Artificial y cuál es la inversión que se espera?
Globalmente, como Deloitte, nosotros hacemos un estudio al cierre de cada trimestre asociado justamente a la adopción y al impacto que está generando nuestra tecnología y hay cosas que son como bien sobresalientes.
Por ejemplo, hoy, ya más de… y aparte hicimos el año pasado un estudio solo para Chile, con una muestra bastante representativa y ahí de alguna forma pudimos concluir varias cosas.
Primero, el nivel de adopción hoy en día ya es mayor, es más del 50% a nivel de empresas de distinto tamaño, lo cual es mucho, es mucho para solamente un año que ya hoy más de la mitad de las empresas estén usando esta tecnología, es brutal. Las proyecciones de generación de valor adicionales que hacemos nosotros están en el orden de trillones de dólares adicionales justamente derivados de temas de productividad, de generación de nuevos productos y servicios, generación de nuevas experiencias.
Entonces, y eso, como les comentaba, yo creo que es una proyección bastante realista, porque si tú miras las brechas, por ejemplo, tomemos el tema de la productividad, en cualquier industria hoy en día, la que sea, las brechas asociadas a temas de manualidad son enormes y realmente eso es muy real: las cosas que de repente hoy se demoran días, con este nuevo nivel de automatización habilitado por la inteligencia artificial, van a pasar a demorarse minutos, horas. Y ese impulso de productividad no lo habíamos visto antes. Eso es impresionante, y yo creo que ahí está el potencial.
Todo calza, pero a la vez todo está en ciernes, porque resulta que, tanto en Alemania, uno de los países más industrializados del mundo, como en Chile, hace 10-15 años que la productividad está estancada. Entonces, ¿esta es una promesa para la productividad, o ya se está viendo?
Ya se está viendo. Y déjame decirte alguna estadística concreta que a mí me toca muy de cerca, porque vengo de esa vertical, la productividad de los equipos de tecnología, el crear soluciones tecnológicas, no es lo mismo si incorporan AI o no, y hoy la productividad en promedio está aumentando un 30%. Eso quiere decir que, si yo tengo, cinco programadores, esos cinco programadores con el uso activo de esta tecnología, como mínimo son un 30% más productivos. ¡Eso es mucho!
Eso es para algunos roles, pero en el resto de las posiciones no informáticas, ¿qué es lo que tienen que hacer las empresas ahora?
Las empresas tienen que parar un poco la pelota y decir, ‘¿cuál es la naturaleza de mi trabajo y de los roles que tengo en mi organización hoy? Son estos roles. Perfecto. Entonces, ¿qué tareas realizan? Realizan estas tareas’…Y hay que empezar un trabajo muy fino de mapeo entre esa naturaleza de las tareas que realizan, y de cómo se pueden hoy asistir con la Inteligencia Artificial. Ya vas a ver que en la medida que eso empieza a celebrarse, esa promesa de productividad se va a empezar a materializar.
Lo que pasa es que hoy, para mí hay una hiper-expectativa de mejorar la productividad, pero no está claro el cómo. Porque es válido detenerse a pensar ‘¿qué es el más productivo? ¿Le tengo que instalarle ChatGPT a todo el mundo? ¿Les tengo que instalar Copilot, mejor?’
¿Es un poco tomar las riendas y no dejarse llevar por el hype? ¿Decir: ‘Yo controlo a la IA, no es la IA que me controla a mí’?
Totalmente. Y hacer ese ejercicio mucho más reflexivo, mucho más detallado, porque la cantidad de herramientas que hay son infinitas. Posiblemente, en ese mapeo, yo llegue a la conclusión de que también tengo que crear mis propias herramientas, por la naturaleza de mi negocio. Y las empresas que primero hagan eso van a ser las que van a notar la mejor productividad, mucho más rápido.
¿Qué se espera para este 2025 en IA? ¿Qué tendencias avizoras?
Para mí, lo primero es la capacidad, digamos, de razonamiento que tiene este tipo de inteligencia artificial, que va a ser cada vez más efectiva. Eso quiere decir que yo voy a poder aplicar esta tecnología para escenarios cada vez más complejos que requieren correlacionar información. Y eso creo que es un tema muy importante, el cual [las industrias] van a seguir invirtiendo. Quizás es un tema que está más en el plano más técnico, pero es tremendamente relevante porque los resultados los vamos a ver a través de herramientas que cada vez van a ser más inteligentes y efectivas resolviendo problemas cada vez más complejos.
Lo segundo es que va a haber una aceleración notable entre la convergencia de estas tecnologías y la robótica, o la creación de dispositivos que incorporan inteligencia artificial de esta naturaleza en el dispositivo. Un Smart TV es un dispositivo bien poco inteligente, si yo lo comparo con los televisores del futuro, con los cuales voy a poder mantener una conversión quizás con la misma naturalidad con la que estamos teniendo ahora. Entonces ese concepto podremos extrapolarlo al auto, a un electrodoméstico o, inclusive, a un robot trabajando para ti en tu casa.
Eso es algo que se viene, porque de alguna manera hay mucha inversión también allí, la tecnología hoy día está evolucionando muy rápido y hay una convergencia natural entre la robótica y la inteligencia artificial generativa, por ejemplo, que va a empezar a expresarse a través de soluciones como robots cada vez de manera más acelerada.
¿Estás de acuerdo con esa frase que dice: ‘tú no vas a perder tu empleo por la inteligencia artificial, vas a perder tu empleo ante una persona que sabe usar inteligencia artificial’ ¿Eso se está viendo?
Absolutamente…
O sea, alguien que no sepa usar herramientas de IA es como una persona que no sabe inglés, al final.
Exacto, va a ser casi análogo. Dependerá mucho del contexto, pero la verdad que sí, yo creo que hoy, en el contexto empresarial, en cualquier industria, saber dominar estas tecnologías te va a dar un plus enorme. Eso no quita mérito a las personas creativas…La creatividad va a seguir estando en la persona, en cómo usa las herramientas. Pero fíjate que vamos a tener que, de alguna forma, explotar nuestros propios skills de una manera distinta. Y esa transformación también es una transformación en el plano profesional tremenda. Prácticamente todos -¡pero todos!- tenemos que experimentar. Quien no la quiera experimentar o se resista, posiblemente quede en desventaja.
Recientemente salió la IA llamada DeepSeek, que es china, ue dicen que es mejor que ChatGPT, pero a una fracción de su costo. ¿Qué IA de todas las que existen hoy va a prevalecer, al final?
Por lo general estas empresas publican ciertos papers donde referencian pruebas que hicieron previamente, así que podrían ser supuestamente auditables o verificables, y en donde prueban la performance del modelo que están lanzando. O de la herramienta. Y lo hacen todos, no solo DeepSeek. Está la misma la naturaleza del modelo, todos más o menos cuando lanzan abogan que hicieron pruebas y estos son los resultados. Y por lo general se comparan contra uno. Ahora en la práctica, eso igual no es tan relevante si después posteriormente no hay adopción. Cuando se produce una adopción masiva de estas tecnologías, ahí es donde realmente todo empieza a acelerarse. Porque a medida que empiezan a haber desarrolladores usando los modelos, empiezan a crear soluciones, etc. Ahí es donde realmente las empresas empiezan a tener un rol dominante.
Hoy, la verdad es que todavía sigue habiendo una posición bien dominante de algunos proveedores, por ejemplo, OpenAI. Y después hay un ecosistema de otros proveedores de modelos cerrados y de modelos abiertos brutalmente enormes, como Anthropic, Google, Amazon, que lanzó recientemente también sus propios modelos muy interesantes también. Hay un ecosistema enorme. Entonces, para mí la clave es adopción. Puede estar muy lindo, inclusive paradójicamente podrías tener el modelo perfecto, pero si nadie lo usa, no sirve para nada. Es en la adopción donde se genera la ventaja competitiva.
O sea, si tú tienes un sistema no muy perfecto, el sistema A, y uno perfecto que es el sistema B, pero por marketing, confianza o lo que sea, se usa más el A… ¿ese va a tener una supremacía?
Y si vas para atrás en el tiempo, ese patrón se ha repetido sistemáticamente: la tecnología que termina siendo la dominante no necesariamente es la mejor. Es la adopción.
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