Mi duende Mágico es una creación chilena que ha introducido desde 2012 un serie de perosnajes amigables y fantásticos para niños y niñas.
La Zona Marketing es la agencia de marketing chilena que creó la licencia hace 9 años, liderada por Bernardita Astaburuaga, gerente de negocios y creadora de la marca que hoy es un hit entre los niños y niñas en Chile, quienes los coleccionan y esperan año a año sus nuevas versiones.
Bernardita Astaburuaga, Directora de Negocios y creadora de la licencia, señala “Es un orgullo ver cómo nuestros fans, niños, padres y educadores, aprecian el valor agregado de nuestros productos, el contenido educativo y valórico, sumado a un mundo mágico de entretención. Este año ha sido muy complejo una vez más, producto de la Pandemia en China y las restricciones dadas en nuestro país, pero logramos llegar a puerto con algunas iniciativas».
Desde sus inicios, en 2012, se buscó recrear la historia de los ayudantes del Viejito Pascuero en el polo norte y todos los años se le ha agregado valor, dotando la campaña de una narrativa cada vez más profunda que genera historias en torno a sus personajes y los niños. En cada colección se trabajan distintos mensajes valóricos a potenciar en navidad, por ejemplo, el 2017 fue dejar un brillo donde sea que vayan, incentivando a los niños a ser un aporte en cada cosa que realicen; el 2018 el concepto estuvo asociado a la valentía, a la autenticidad, bajo el lema LLa Magia de ser tú mismo».
Las razones del éxito entre los niños han sido su valor y espíritu diferenciador en el desarrollo de lazos afectivos dentro de las familias -al crear una tradición, juego entre grandes y chicos-; valor educativo -desarrollo de la imaginación, entrega de mensajes valóricos positivos-, además de un mix perfecto entre precio y calidad, con un diseño destacado y un contenido literario muy creativo, explica la agencia de marketing en su comunicado.
¿Qué la distingue? “No hay licencias chilenas desarrolladas de esta manera, ya que la mayoría de las estrategias de marketing, vienen a Chile de la mano de grandes marcas extranjeras, por lo que es un orgullo, fue un emprendimiento que ha dado resultados, después de mucho trabajo y perseverancia”, indica Bernardita Astaburuaga.
Todo esto ha sido posible gracias a la asociación de la licencia con Tarjeta Cencosud Scotiabank y a los retailers del grupo Cencosud, Jumbo, Paris, Easy, Santa Isabel, donde se pueden encontrar los productos. Junto a ellos, ampliaron la gama de productos a vender, ya no son solo peluches, sino todo el mundo de los personajes y productos de distintas categorías.
“Hoy se espera replicar esta experiencia en otros países. Ya se hizo en Colombia y en Perú, pero el mercado es gigantesco y nos enfrentaremos al desafío de adaptarnos a cada uno de ellos”
En el marco del lanzamiento de la nueva colección, se realizó una experiencia en el Mall Costanera Center, un túnel curvo con pantallas 3D en donde los niños viven la experiencia de estar en el Polo Norte, en la aldea Noel, junto a sus personajes favoritos que se les aparecen traviesamente.
“Al salir de esta experiencia, te encuentras con un photo oportunity, donde los niños pueden sacarse una foto junto a Goldy, nuestro querido perrito y apreciado por ser el acompañante y guardián de la magia dorada de los niños con cáncer, a través de la Fundación Nuestros Hijos” agrega Bernardita.
Desde el 2019, mantienen esta alianza con Fundación Nuestros Hijos para mejorar la calidad de vida de niños y niñas de escasos recursos que se encuentran enfrentados a difíciles tratamientos contra el cáncer. Goldy, ha sido el personaje que ha permitido que las familias que lo hayan invitado a ser parte de la tradición familiar.
Muchas otras sorpresas destacadas en redes sociales, con niños de todo el mundo saludando con los personajes, nuevas canciones en Spotify, así como un espectacular concurso que invitó a los niños a soñar en conocer algunos de los lugares por donde pasó este año el equipo Mi duende Mágico en su globo y así dar la oportunidad de dar a conocer lugares tan exóticos y únicos como Capadoccia, desde donde proviene nuestro ciervito KAR.